viernes, 11 de abril de 2008

Vecinos Ladilla.

Coño esta sonando el timbre, que ladilla dejame dormir, es obvio que esta ladilla no sabe que ayer estuve de farra y me acosté a las 2 am con una pea de ron con chinotto, porque si lo supiera no estaría tocando el timbre como una persona con problemas mentales a las 8 am.

Que caligueva pues, mejor me paro para que por fin me deje de joder y poder volverme a dormir después de cerrarle la puerta. Abro medio ciego a causa de no tener los lentes puestos porque me acabo de levantar para abrir esta mierda.

Apenas abro oigo dos cosas: un reggaetton estridente viniendo de la casa del frente y una voz femenina.

Voz Femenina: Hola. Tu mamá no está, verdad?

Le digo: No, no está.

Pero en Realidad Pienso: Claro que no está, rolo de pendeja, por algo es que tarde tanto en abrir. Por cierto Who the Fuck are you?

En ese momento veo bien y me doy cuenta de que es mi vecina; quien en un tono que no sé si es cinismo o ingenuidad, me hace una pregunta que hace disimular mi arrechera matutina:

Vecina: Disculpa, ¿Te desperté?

Le digo: No vale tranquila, ya estaba despierto.

Pero en realidad Pienso: De bolas que me despertaste, ¿Es que acaso crees que estas ojeras las tengo porque estoy copiando el estilo de Tim Richardson? Además ¿No estás escuchando mi voz de borracho trasnochado con ganas de golpear a quien lo despertó?

Vecina: Ah ok, lo que pasa es que necesito que me pases un botellón de agua, porque como no tengo filtro yo pensé que ya habrías llenado tus potes, para que me pases uno.

Le digo: Ok ya te lo paso.

Pero en Realidad Pienso: No, no he llenado los potes porque me acabo de despertar, maldita arpía desconsiderada; que no te puedes comprar un filtro para ahorrarte mis arrecheras matutinas. ¿Sabes que? Te daré el pote, sólo si con eso me deshago de tu presencia perturbadora, y si eso evita que sigas observando mi casa desde afuera como si se te hubiera perdido algo adentro de ella.

Agarro un pote rápidamente, y se lo doy haciendo esfuerzos sobrenaturales para no tirarselo en su cara.

Vecina: Ay muchas gracias, y ¿Cuando vuelve tu mamá?

Le digo: Creo que mañana.

Pero en Realidad Pienso: Eso no es problema tuyo, ya te di el pote ahora dejame en paz porque con tu ladilla ya hasta me mataste el sueño, contribuyendo a mis problemas de insomnio.

Vecina: Ah ok gracias. Hasta luego.

Le digo: Ok.

Pero en Realidad Pienso: Gracias a ti, por matarme el sueño, maldita arpía ladillosa. Y eso de hasta luego, por favor si vuelves a venir a ladillarme, te mando al coño e' tu madre con todo y reggaetton.

Quizas con esto pienses que soy un maldito amargado coño e madre; esta bien quizás yo lo sea, pero es que esta vaina me pasa casi todos los sábados. Imaginense tener un vecino ladilla que te jode el fin de semana que tanto necesitas para recuperar lo que no dormiste en la semana.

Está bien que necesites el agua y vaina, porque en el estado en el que vivimos nada más tenemos agua tres días , pero verga es obvio que sabes que yo a esa hora estoy durmiendo; así que si tuvieras una pizca de consideración, dejarías de tocarme el timbre a esa hora para joderme por cualquier vaina que te pase.

P.D.: A veces no me pide agua, sino que viene a tocarme la puerta por razones desconocidas.

2 comentarios:

Pedro dijo...

mis tres vecinos: uno se roba el correo de los demás para usar el papel de los sobres para sus porritos de marihuana (el mismo me lo dijo), la otra guarda su aspiradora en medio del pasillo del edificio (lleva 1 año ahí, y me dijo que es el lugar donde la guarda, ojala se la roben), y el otro me ha tocado la puerta a la 1am para preguntarme si tiré un galón de leche por las escaleras...

Angie Rodriguez Instagram Links dijo...

Bueno, en mi caso suceden cosas como estas:

1. evangélicos, mormones, protestantes o hare krishna que quieren convencerme de que su religión es la mejor. Opté por decir que soy judía o abrir la puerta desnuda para que huyan y no vuelvan más, pensando que soy la encarnación del anticristo.

2. vecinos pidiendo mariqueras

3. vecinos quejándose por mariqueras

4. equivocados o personas que van a cualquier otro departamento de mi piso pero por alguna extraña razón SIEMPRE tocan mi timbre.

5. (por la temporada) vecinos preguntando por mi abuela atropellada.

¿cuándo me tocarán para decirme que me gané algún premio multimillonario?